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Justicia ambiental vía podcast

por Revista Cítrica
12 de abril de 2025

En tiempo de negacionismos climáticos y otros incluso más graves, el Centro de Derecho Ambiental de la UBA lanzó un concurso de podcast para conmemorar el Día Mundial del Ambiente. La propuesta invita a estudiantes, comunicadores y activistas a narrar historias sobre contaminación por plásticos, la crisis de los glaciares y la urgencia de pensar en clave de justicia ambiental.

El Centro de Derecho Ambiental de la UBA lanzó un concurso de podcast para conmemorar el Día Mundial del Ambiente. La propuesta invita a estudiantes, comunicadores y activistas a narrar historias sobre contaminación por plásticos, la crisis de los glaciares y la urgencia de pensar en clave de justicia ambiental. Porque la disputa por el futuro también se libra en el terreno de las palabras y los sonidos.

En tiempos de discursos vaciados, la universidad pública busca nuevas formas de sacudir conciencias. El CeDAF de la Facultad de Derecho de la UBA presentó un concurso de podcast que, más que certamen, es una excusa para abrir el juego a voces jóvenes, barriales y comunitarias. La iniciativa se enmarca en el Día Mundial del Ambiente y apunta a poner sobre la mesa tres batallas urgentes: la basura plástica que envenena mares y ríos, la fragilidad de los glaciares como reservas estratégicas de agua y la necesidad de entender la justicia ambiental como un derecho humano básico.

“Queremos escuchar relatos que incomoden, que cuenten lo que no se dice en los grandes medios”, explicaron desde la organización. El formato elegido no es casual: el podcast se volvió una herramienta de resistencia para quienes no tienen cámaras ni antenas pero sí historias que valen la pena.

La convocatoria está abierta durante todo abril y busca que la creatividad se cruce con la militancia ambiental. No se trata solo de grabar: se trata de contar desde abajo lo que el poder político y corporativo suele esconder. En una ciudad saturada de cemento, humo y promesas de “modernización”, la propuesta recuerda que el aire, el agua y la tierra no son mercancías.

Más que un concurso, es una invitación a tomar la palabra, encender el grabador y gritar en formato audio que la crisis climática ya está entre nosotros. Y que si no se escucha desde las calles, al menos se escuche en los auriculares