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Subsidiar la sequía

por Pablo Bruetman
21 de febrero de 2020

¿Sabías que las provincias argentinas con más presupuesto son las mismas que tienen más deuda? ¿Y sabías que tienen en común? Vaca Muerta y fracking.

Es curiosa la palabra depredar. Según el diccionario significa “saqueo violento que causa destrozos”. Y en una segunda acepción, es un “abuso económico que consiste en malversar bienes públicos o imponer a alguien cargas, tributos o sanciones económicas injustas, empobreciendo a la población”. Se trata de un apelativo nunca mejor puesto para definir al fracking y a todo su entorno devorador.

La provincia de Mendoza se debate entre Vaca Muerta y la brutal sequía que la azota. El fracking viene arrasando con todo. Hay más de 40 pozos activos, con la intención de multiplicarlos al menos por tres. Está prohibido en 16 países, pero no en Argentina, donde consume agua potable en cantidades monumentales –la contamina para siempre- y es mezclada con químicos cancerígenos -más de 600 componentes, 16 millones de litros en 5 años- de los cuales muchos de ellos son radiactivos. Los pozos de fracking con ramas horizontales más largas, como muchos ya usuales en el área neuquina de Vaca Muerta, pueden llegar a consumir hasta 60 millones de litros de agua cada uno. Además envenena acuíferos, aire, suelo, alimentos. Genera lluvia ácida, malformaciones humanas, leucemias, abortos espontáneos, destruye la agricultura ecológica y sustentable, no genera empleo sino un irreparable desempleo, pobreza e indigencia. En este contexto, los gobiernos, tanto nacional como provincial, subsidian esta práctica con tarifazos al pueblo, y la defienden con gases, palos y represión.

Marcelo Giraud es geógrafo y miembro de la Asamblea Popular por el Agua. Intervino en las reuniones de comisiones en la Legislatura local, en defensa de la Ley 7722. "Las teóricas regalías mineras metalíferas extractivistas serían irrisoriamente ínfimas, comparadas con el presupuesto provincial. No han sido relevantes en San Juan, y menos aún podrían serlo en Mendoza", explica.
Señala además que "en Mendoza, el ex gobernador radical macrista Alfredo Cornejo, decretó rebajar las regalías petroleras del 12% al 9% -para las petroleras que hagan fracking-, y del 12% al 6% para YPF, en el área de crudos pesados de Llancanelo". "Y por supuesto hay otros ítems que merecerían atención, como la colosal pauta publicitaria destinada a medios hegemónicos, más aún el año pasado, en tiempo electoral; también la reasignación de partidas presupuestarias por decreto y demás".

Y así ocurrió. El decreto provincial 977 del Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía del 10 de mayo de 2019, y su similar número 485, del 26 de marzo del mismo año, confirman las rebajas de regalías, del 12 al 9% para el petróleo obtenido mediante fracking, y al 6% para los crudos muy pesados de Llancanelo, explotado por YPF y la empresa canadiense Pentanova Energy Corp.

Neuquén tiene uno de los presupuestos por habitante más altos del país y es la segunda provincia más endeudada.

En esta rebaja, cabe destacar a la empresa El Trébol, filial local de Phoenix Global Resources, que si bien tiene sedes en Suiza y Londres, dos de sus socios importantes son –nada menos que- los empresarios Daniel Vila y José Luis Manzano, que ya cuenta con 24 pozos en yacimientos no convencionales para explotación mediante fracking, según el Ministerio de Energía de la Nación.

El impacto presupuestario de esos subsidios en forma de menor pago de regalías es aún limitado, pues el petróleo obtenido mediante fracking no alcanza a ser el 1% del total extraído en Mendoza, sin embargo las decisiones del gobierno mendocino -sin dudas- tienen la intención de incentivar fuertemente la explotación mediante la fulminante depredación que provoca la hidrofractura.

Giraud realizó un profundo trabajo estadístico, con datos oficiales, referido al peso relativo de las regalías sobre los presupuestos provinciales. "Son totalmente hidrocarburíferas, en provincias obvias como Mendoza o Chubut; en otras, como Salta o Santa Cruz, hay una mezcla entre hidrocarburos y minería metalífera, aunque predominen ampliamente las de hidrocarburos, y en unas pocas zonas son sólo metalíferas, como San Juan o Catamarca". 

"Y también el caso de que las regalías abundantes -como en Neuquén- de ningún modo implican la menor garantía de presupuestos provinciales relativamente equilibrados. Pues en el caso neuquino, que por habitante tiene uno de los mayores presupuestos en el país, tiene también el segundo mayor endeudamiento per cápita", resalta el especialista.

En el gráfico 01 Giraud señala que "lo había hecho principalmente por el tema de minería metalífera, por eso aparecen resaltadas San Juan y Catamarca, en contraste con Mendoza. Y también con el tema de las transferencias desde Nación a las provincias, llevándolas a transferencias por habitante. Pero se ve claramente el peso de las regalías per cápita en las diferentes provincias".

"Para mostrar una perspectiva más amplia, relativamente independiente de las coyunturas, calculé el promedio de la década 2009-2018. Y el ítem 'Seguridad Social' tiene valores sólo para las provincias que no transfirieron sus cajas de jubilaciones. Si descontaras esos montos de los presupuestos provinciales en las provincias que aún las conservan, ese 22% de las regalías en el presupuesto neuquino sería aún mayor. Tiene los segundos mayores ingresos per cápita, y a pesar de eso -y por enorme diferencia con el promedio nacional (casi el triple)- la segunda mayor deuda pública per cápita", denuncia Giraud.

En trabajos realizados por el geógrafo sobre la Ejecución Presupuestaria en Neuquén, Giraud señala que los datos están basados en números del archivo del Ministerio de Hacienda. "Calculé el crecimiento de los diferentes ítems del presupuesto en los períodos 2010-2018 y 2014-2018. Es descomunal el crecimiento de la ejecución en pago de deuda pública, en comparación con todos los otros ítems, para una provincia que supuestamente debería gozar de un presupuesto 'sano' gracias a la inyección de dinero de las regalías por gas y petróleo", asegura.

Giraud comente además que "en EE.UU. los frackineros también han vivido gracias a los subsidios explícitos o implícitos. Claro que allá lo han hecho de un modo no tan descarado; y así es como -con las caídas más brutales de cotización del crudo- también se vino a pique el número de equipos de perforación en actividad. Acá, en Argentina, esas caídas -y reactivaciones con las posteriores alzas- no fueron tan brutales justamente gracias a los subsidios que cubrían todo".