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CABA: Las cooperativas le ganaron a los buitres

Ansol
25 de junio de 2015

Después de la movilización, el HSBC devolvió una máquina fundamental para la continuidad laboral a la cooperativa de la Gráfica Vulcano, de Liniers.

El miércoles 24, luego del mediodía, los asociados de la Cooperativa Vulcano se concentraron en la sede bancaria de la calle Florida, en la Ciudad de Buenos Aires. Fueron recibidos por los directivos de la entidad, quienes adelantaron que la prioridad de compra de la maquina -una de las que quedó dentro de los bienes tras el vaciamiento de la gráfica- será de los trabajadores.

 “Nos recibieron y nos pidieron disculpas por habernos cerrados las puertas a tener algún tipo de negoción. Acordamos que mediante el sindico se va a pedir una autorización al Juzgado para entrar y hacer una evaluación de la maquina y, de acuerdo a eso, hacerle una oferta al banco con una cotización que nos sirva a nosotros y a ellos. Lo importante es que la prioridad -en la compra- será nuestra”, confirmó a esta agencia el presidente de la Cooperativa Gráfica Vulcano, Daniel López.

Este mediodía, luego de una concentración frente a la sede del HSBC de la calle Florida, en la Ciudad de Buenos Aires, López; el abogado de la cooperativa, Pablo Godoy; y referentes de la Sindicato Federación Gráfica Bonaerense, fueron recibidos por directivos de la entidad y lograron destrabar el conflicto por la compra de una máquina que había sido adquirida a través de un contrato de leasing de ese banco.

Cabe recordar que los trabajadores de Vulcano expusieron públicamente que el HSBC se negaba a negociar la compra de la impresora -una de las que quedó dentro de los bienes tras el vaciamiento de la gráfica- que los empresarios Fernando Blanco y Lorenzo Berriex adquirieron a través de un contrato de leasing de esa entidad financiera.

En ese marco, convocaron a una movilización que, finalmente, se realizó pasadas las 12 del mediodía y en la que acompañaron el sindicato, la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), la Federación de Cooperativas Autogestionadas de Buenos Aires (Fedecaba), y el Grupo de Empresas Sociales y Trabajadores Autogestionados de la República Argentina (Gestara), entre otros espacios.

Frente a la entidad financiera, el secretario general adjunto de la Federación Gráfica Bonaerense, Hector Amichetti, recordó que “de decir, como en la última reunión, que no negociaban con cooperativas” pasaron “a decir que debe ser un error de alguien del banco que pensaron que Vulcano en realidad les pedía un crédito. Se anticiparon a nuestra movilización, presentaron un escrito en el Juzgado para que se suspenda el retiro de la maquina diciendo que iban a negociar”.

Consultado por Ansol sobre los próximos pasos, Godoy remarcó que los trabajadores solicitaron la continuidad laboral al juez de la quiebra, Gerardo Santicchia, cumpliendo con todos los requisitos legales que establece el Artículo 190 de la ley de Concursos y Quiebras.

Origen

El conflicto laboral comenzó en 2011 cuando la planta contaba con 60 trabajadores; un año después despidieron mensualmente a varios; y un año y medio más tarde, la empresa contaba con 20 empleados en total.

Finalmente, en diciembre de 2014 se realizó un lockout patronal -que incluyó el retiro de maquinaria- y tres meses después, en marzo de este año, la empresa quebró: desde entonces, los trabajadores insisten en la continuidad laboral y aguardan en carpas fuera de la fábrica de Virrey Liniers 1437, en la Ciudad de Buenos Aires.