“Nuestras luchas, históricamente, son delito”

por Revista Cítrica
16 de enero de 2017

Entrevista con Martiniano Jones Huala, integrante de la comunidad Pu Lof en resistencia, Departamento Cushamen. La situación actual, la histórica y un Gobierno que invita al "diálogo" después de reprimir.

¿Cómo están viviendo estas horas en la comunidad?

Es muy duro, y hay que entender por qué llegamos a esta situación. Nosotros históricamente venimos tratando de evitar esto. Pero somos un pueblo valiente y también decimos que hay que luchar para estar mejor. Y eso es delito. Eso siempre fue así para nosotros. Nuestras luchas, históricamente, son delito. Tratamos, lo más pacíficamente posible de recuperar las tierras, porque nosotros hemos quedado en la miseria total. Acá estamos todos juntos en la comunidad, pero la mayoría de los hermanos mapuches están hacinados en la periferia de los barrios de las principales ciudades de la Patagonia, como Bariloche, Esquel, Rawson, Comodoro, Puerto Madryn. Somos la mano de obra barata, las sirvientas. Nuestros hijos no tienen ningún porvenir. Y los políticos nos dan la espalda o nos quieren usar. Nosotros hemos decidido cambiar esta situación. Sabíamos que iba a ser difícil pero así y todo no podíamos ser cómplices de nuestra desgracia en el futuro. Por eso decidimos pelear por nuestro futuro, porque tenemos muchos chicos. Es muy fuerte lo que está pasando en este lugar, pero el mismo lugar nos está pidiendo que nos hagamos cargo de esta situación. Que cuidemos la tierra, que es de todos. Vinieron por todo, vinieron por el agua, por la tierra. No tiene que ver sólo con el pueblo Mapuche nuestra lucha. Va mucho más allá. Tiene que ver con la sociedad y con el futuro de todos los chicos.

¿Por qué creés que fue tan sanguinaria y brutal la represión?

Buscaban una muerte, no te quepa ninguna duda. A Facundo Jones Huala lo están buscando para matarlo. El tiro que le pegaron en la cara a Fausto, mi otro sobrino, era para Facundo, lo confundieron. Porque él fue el preso político que tuvimos durante mucho tiempo en la comunidad, y que finalmente liberaron porque no podían comprobar todo lo que inventaron. Él está con nosotros y tenemos que protegerlo. Ese tiro era para él. Es muy grave todo esto. Hoy por hoy nosotros podemos contar lo que pasa y la tecnología nos sirve, pero durante muchos años mucha gente no pudo contar lo que le pasó y nadie se enteró. Este territorio está regado de la sangre de toda esa gente, por eso nosotros no vamos a dejar este territorio. Por eso nos persiguen, por eso nos quieren matar.

¿Cómo están los compañeros que fueron golpeados y detenidos?

Están fuera de peligro pero los médicos dicen que van a quedar con muchas secuelas. Uno es muy posible que pierda el oído, y al otro le van a poner una prótesis porque le destruyeron la cara. Nosotros nos hemos preparado para esta situación. No pensamos que iba a ser tan fuerte, pero nos vamos a recuperar. Tenemos mucha fuerza porque hay mucha gente que nos acompaña. Y nos están ayudando a visibilizar. Toda la gente se va a enterar quiénes somos los mapuches, qué estamos haciendo y qué estamos reclamando. Yo pediría que todos los que puedan se acerquen para conocernos.

Ayer, domingo, no había ni una sola línea en Clarín ni en La Nación...

No es una novedad. Por suerte acá están llegando muchos medios internacionales. Ayer vino un medio de Alemania y una periodista de Italia, y también están llegando de otros países. Hay mucha gente fuera de Argentina que también está interesada en lo que pasó y lo que está pasando. Para nosotros es importante eso. Sería bueno que todos supieran bien de qué se trata. Pero ya va llegando, cada vez más gente se va enterando. Estamos tranquilos, porque tuvimos difusión y sentimos el acompañamiento. También vinieron de organismos de Derechos Humanos, las Madres de Plazo de Mayo y muchos otros lugares.

¿Se acercó alguien del Gobierno?

Nosotros no nos hemos reunido con el Gobierno en los últimos días, por más que dijeron que se reanudó la mesa de diálogo. Eso es mentira. El viernes se acercó un funcionario para armar una mesa de diálogo si es posible para hoy, lunes. Iba a convocar a un montón de gente. Pero nosotros le dijimos que la mesa de diálogo estaba armada y la rompieron ellos con lo que hicieron. La mejor manera de ayudarnos ahora es que nos dejen tranquilos un tiempo, que nos dejen vivir. Y a partir de ahí ver. Si tienen buena voluntad que nos dejen unos días tranquilos, y después entonces veremos y armaremos una mesa de diálogo. Pero ellos nos mintieron. Y no nos mintieron una vez, sino siempre. Nos traicionaron toda la vida. Le mintieron a nuestros mayores y ahora nos mienten a nosotros. ¿Cómo vamos a confiar en ellos?

Si realmente hubieran estado interesados en el “diálogo” no habrían roto la mesa de diálogo con la represión.

Sí, nosotros hemos querido evitar eso. Y por eso nos pusimos a dialogar, y tratamos de acordar cómo sería cuando pasara La Trochita. Nosotros participamos de la mesa de diálogo, e íbamos acordando algunas cosas, pero ellos se encargaron de romper ese diálogo con la represión y la violencia. Nosotros estamos ocupando espacios sagrados. Y cualquier ruta o vía que pasa por dentro nuestra comunidad, están obligados a pedir permiso, a avisar. Eso es lo que nosotros pedíamos, que nos avisaran, porque podemos estar en una ceremonia. Pero no les gustó. Hay un tema más profundo de fondo. Hay intereses políticos y económicos. Nosotros no podemos estar acá ni en ningún lado. Ellos quieren que nos vayamos separando y así seguir perdiendo nuestras costumbres y nuestra fortaleza. Y nosotros desde hace años estamos buscando la reconstrucción de la memoria, de nuestra familia, de nuestra identidad. No podemos seguir siendo cómplices de esta miseria.

¿Algún mensaje que quieras transmitir?

Estamos en un territorio que es muy especial, y nosotros los mapuches no lo vamos a abandonar. Hay una sociedad mapuche muy grande. Y por eso lo primero es que nos juntemos los mapuches, que no tengamos miedo, que nos juntemos para defender el futuro de los que vienen. Y estamos pidiendo acompañamiento. Que nos conozcan. A veces la misma gente de Esquel no te conoce o no te quiere conocer. Y se quedan con la idea de lo que dicen los medios de acá. La idea es que cada vez más gente conozca lo que somos. Estamos todos en la misma, defendiendo el futuro de nuestra tierra y nuestros hijos.

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