Un bolsón de injusticias

Justamente naturaleza es lo que busca cada uno de los turistas que año tras año se acerca a la zona de El Bolsón. Y el discurso hegemónico lo sabe. Por eso deforma la realidad y sostiene que la adjudicación de las hectáreas a Laderas para montar un espacio turístico hará crecer a la comunidad, a través del comercio y la generación de más empleo. Por supuesto la Asamblea en Defensa del Agua y la Tierra no cree que eso vaya a suceder: “La gente viene buscando el paisaje como está hoy y el modo de vida de la gente de acá, que se caracteriza por la biodiversidad y las diferentes culturas. Y esto amenaza nuestra forma de vida. Además el espacio turístico serán más de 300 hectáreas que van a tener sus propios comercios, no van a necesitar de El Bolsón”, afirma Silvana Rojas, miembro de la Asamblea.

Las quinientas familias que podrían quedarse sin agua son las que viven en Mallín Ahogado. Los nadies de siempre, los que permanecen en sus tierras desde tiempos inmemoriales y las heredan de generación en generación hasta que un magnate, con la complicidad del poder político, se las quita. “Este proyecto pretende asentarse en un valle de altura que contiene a modo de esponja el agua que baja del cerro. Si el proyecto se concreta el agua no llegará a desviarse por los ríos y arroyos, y por tanto tampoco llegará a los habitantes de Mallín Ahogado. Encima estamos transitando una emergencia hídrica y en el verano las temperaturas son muy altas, por lo que el espacio productivo también está en riesgo al haber altas posibilidades de incendio. Entonces se pone en peligro el agua y la vida rural. Y Mallín no podrá extenderse nunca: de un lado limita con la montaña, del otro con Lewis”, agrega Silvina.

Rocío Contreras es vecina de El Bolsón y participa del acampe que busca visibilizar el negociado y evitar la apropiación de los bienes naturales puestos al servicio de la usura. Quiere informar a los vecinos desde la realidad de los hechos: “Los políticos  salen a conversar con la gente y la dibujan, no cuentan lo que en realidad van a hacer. Darán trabajo pero se olvidan de la contaminación y de que los productores se van a quedar sin agua”, asegura.

“Nos gobierna Todos Somos Río Negro, que es como el PRO, gente de plata, de élite, iluminados de este lugar que creen que ese es el progreso. Quieren traer un desarrollo que no es el que quiere la población. No tienen en cuenta el ámbito rural. Los que habitamos ahí para ellos somos todos una lacra, somos gente descartable. Les han pagado para esto. Están de los dos lados del mostrador. El intendente, por ejemplo, era el contador de la empresa”, detalla Silvana sobre los que a espaldas de la soberanía popular toman las decisiones en El Bolsón.

A la soberanía la silencian, la tapan. Y cuando no alcanza con ahogarla, la queman. “El lunes 19 a la noche quemaron nuestra bandera que dice ‘soberanía popular’. No es la primera vez. Hace uno años cuando incendiaron un centro comunitario en Mallín Ahogado habían quemado la misma bandera. Esta vez fue cerca de la una de la mañana cuando escuchamos un ruido, como truenos. En unos minutos aparece el fuego, nos acercamos y vemos que incendiaron la bandera. Se están manejando de una forma ilegal y corrupta. Se acercó gente a querer intimidarnos, ya hubo casos de amenazas a compañeros. Queremos que la gente comprenda nuestra lucha. El municipio está copado por empresas privadas y no responde al pueblo. Detrás de todo esto está Lewis. Invitamos a la comunidad que se acerque”, denuncia Rocío.